arrow_back Oraciones

Al santo de nuestro nombre

San(ta)... a quién de verdad quiero, y bajo cuya protección especial me ha puesto mi amada madre la Iglesia al hacerme hijo suyo en el bautismo, te ruego no dejes, hoy ni nunca, de velar para que viva como corresponde a un cristiano, y según mi nombre, siguiendo tus ejemplos.

Ayúdame en mis dificultades; sobre todo no permitas que caiga en pecado, y alcánzame que sepa hacer de mi vida mi mayor consuelo a la hora de la muerte, para ser contigo eternamente feliz.

Amén.